Tuesday, February 25, 2014

Impermanence - Meredith Monk

If you don't like Meredith Monk, you're better off skipping this album.

If you don't know Meredith Monk, you're better off watching her live videos, like everybody who knows Meredith Monk does.



Sunday, February 23, 2014

La dolce vita - Federico Fellini

La crítica es unánime: La dolce vita de Fellini es una de las mejores películas que se han hecho, una de esas gemas que salen cada 10 años, indispensable para los que quieran entender al cine y su historia. Pero, de todo lo que he leído sobre ella, sólo esta crítica de The Guardian reconoce que La dolce vita no ha envejecido bien: las referencias al catolicismo que llevaron a su prohibición carecen de significado en un mundo cada vez más alejado de la religión y cada vez más inculto para entender referencias veladas a cualquier libro, sobre todo la Biblia; la orgía es bastante liviana en comparación con las escenas sexuales que se ven ahora en cualquier telenovela, y tres horas de escenas vagamente relacionadas entre sí sin un hilo conductor claro es algo que desespera a las audiencias modernas.

The Wolf of Wall Street muestra que, aunque queda poco espacio para películas como La dolce vita, todavía se puede conquistar a la audiencia con películas largas críticas de los absurdos de la sociedad, aunque los realizadores que quieren entrarle a este tipo de proyectos tienen que entender que están condenados a ser vistas como productos de su época, y no joyas universales.Si comparamos la película de Fellini con la de Scorsese, vemos que ambas hablan sobre los excesos de la élite, ambas muestran escenas de sexo, y ambas terminan con un final ambiguo. Pero, a diferencia de La dolce vitaThe Wolf of Wall Street nos resulta digerible porque tiene una estructura lineal clara, las escenas de sexo son más crudas, y deja de lado todas las referencias teatrales y el tema de filosofía existencialista que sí vemos en Fellini, en parte porque el existencialismo nunca le gustó a los gringos (Sartre era comunista), y en parte también porque sería totalmente irreal mostrar a un banquero filósofo. Tanto La dolce vita como The Wolf of Wall Street son productos de su época y su contexto, y por lo tanto tienen que ser vistas como eso: una crónica de una época en específico, no retratos perennes de la humanidad y la mísera condición humana.

La dolce vita, con sus escenas de amor homosexual, su crítica a la decadente aristocracia del siglo XIX, su narración sobre el naciente show-business (la palabra paparazzi viene de esta película) y sus muestras de opulencia en un continente que apenas estaba creando prosperidad tras la Segunda Guerra Mundial, tuvo mucho sentido en la Europa de los 60, pero hoy ya no: a la fecha, sólo los países subdesarrollados y los musulmanes estigmatizan la homosexualidad; los aristócratas y nobles del siglo XIX se han convertido en comidilla para el lumpenproletariado, y Europa pasó de ser el faro de la civilización a un lugar de viejos cada vez más pobres.

Saturday, February 22, 2014

El hombre del traje gris - Joaquín Sabina

El hombre del traje gris fue un álbum de transición entre el Joaquín Sabina que intentó hacer rock, muchas veces con resultados lamentables desde la perspectiva de hoy, y el actual, el que se dedicó a hacer poemas musicalizados.

Como toda transición, este disco incluye elementos del nuevo y el viejo estilo; el eclecticismo es lo que lo define. "Eva tomando el sol", una balada lenta que daría la pauta para el Sabina de hoy, es seguida por "Besos en la frente", intento de rock, también seguida por la super-melancólica "¿Quién me ha robado el mes de abril?" (mi favorita).

Este es un buen disco para el público en general, con un Sabina pleno, quizá en su mejor momento creativo.



Saturday, February 15, 2014

Conquest (Marie Walewska) - Clarence Brown

Conquest depicts the affair of Napoleon Bonaparte and her "Polish wife", Marie Walewska. According to Wikipedia and other sources online, including Walewska's own memories, the movie has a lot of resemblance to historical facts.

Like most movies of the 1930s, Conquest is a collection of theater-like dialogues between the two main characters interrupted by the appearance of some secondary characters. Events outside the love story are nothing but encores linking two scenes where the two main characters just talk and kiss. Over-explotation of Napoleon and Marie leaves outside important pieces to understand the main story: Movies were different from what they are today: they were understood as an extension of theater and hence and opportunity to see actors interpreting characters. Back in the day, a convincing love scene was more important than the plot. Today, the plot is as important as acting, if not more. Also, movies were directed to audiences with some cultural background: in the case of Conquest, Napoleon's evolution from a liberator to a would-be dictator is mentioned en passant, even if it's arguably one of the most important reasons why his love story with Marie falls apart. Audiences were supposed to know these things.

Shortly, Conquest is a movie worth watching for people interested in the history of film-making. The love story is too cheesy for today's fast-love standards, and Napoleonic history is mostly forgotten outside of France. Perhaps the only thing that may interest today's audiences is the characterization of Napoleon by Charles Boyer: at a time when we are all surprised by Charlize Theron's physical transformation in Monster, or Christian Bale's permanent and amazing look changes, it is worth seeing Boyer, considered a sex-symbol at the time, characterizing a despicable and ugly man wearing tight pants with a big  belly.


Friday, February 14, 2014

1978 - Joan Manuel Serrat

De buenas a primeras, 1978 me pareció un disco más del Serrat aburrido de los 80's y los 90's que, como ya se ha comentado en este blog, no pintó en la escena musical ni hizo nada innovador. Tras leer esta crítica, 1978 me siguió pareciendo otro disco más del montón, pero ahora entendí por qué: más allá de la calidad musical, el problema con Serrat es que envejeció, fenómeno bastante previsible y comprensible, aunque los fans no siempre lo entendamos: en el fondo, los artistas son espejos en los que quisiéramos reflejarnos: aceptar que lo que ellos hacen de viejos es confesar que son como nosotros, mortales que envejecen y, eventualmente, mueren.

Ahora que es un viejo y ya no tiene nada que perder, Serrat ha vuelto a hacer música de calidad y en sus giras toca, la mayor parte del tiempo, las canciones que compuso y los poemas que musicalizó de joven. Como dijera ese poema de Machado que musicalizó, ahora que es viejo lo invadió esa "segunda inocencia que da el no creer en nada". Ojalá nos a nosotros nos pase lo mismo también.


Sunday, February 9, 2014

El salmón - Andrés Calamaro

Originalmente, El salmón fue un álbum quíntuple (cinco discos) de 103 canciones y que duraba casi 5 horas. Eventualmente, las exigencias del mercado y la necesidad de amortizar la inversión original obligaron a Calamaro y a Warner Music a sacar varias versiones resumidas.

En El salmón Calamaro incluyó remakes de canciones suyas, covers de otros artistas, canciones inéditas, y básicamente cualquier cosa que grabó en los últimos meses de 1999 y los primeros de 2000. Con más de 100 canciones, se puede decir todo sobre un álbum: hay canciones buenas, malas, pésimas, raras, y cualquier adjetivo que se le ocurra al escucha. Intentar definir y comentar  sobre un álbum así es ocioso, pero para mí, El salmón representa el inicio de una etapa muy experimental de Andrés Calamaro que eventualmente nos dejaría El Cantante y Tinta Roja, dos de los álbumes más polémicos y, para mí, de los mejores de su carrera.

Álbum casi exclusivamente para coleccionistas, el resto de la población puede escuchar El salmón por partes o de un tirón e intentar encontrar algo de provecho: hay para todos los gustos...


La tentation totalitaire - Jean-François Revel

Quiconque ne comprend pas le fonctionnement des partis communistes ne comprend rien à la politique moderne.
Le monde actuel évolue vers le socialisme. Le principal obstacle au socialisme est non pas le capitalisme mais le communisme. La société socialiste future ne peut être que planétaire et elle ne se réalisera donc qu’au prix, sinon de la disparition des États-nations, tout au moins de leur subordination à un ordre politique mondial.

Le deuxième paragraphe cité ci-dessus, est le premier de La tentation totalitaire, ouvrage de Jean-François Revel paru en 1976. Ce paragraphe n’est qu’un résumé du livre, mais une prophétie qui s’avèrerait vraie à la fin de la Guerre Froide, quand les idéologies de gauche étaient tellement discréditées que le néolibéralisme Thatchérien et Reaganien  semblaient la seule voie économique et politique. La réalité donnerait la raison à Revel : le vrai socialisme ne peut avoir lieu que dans un système démocratique où les États-nations se dissolvent progressivement : l’Europe d’avant la crise, où l’État providence a atteint toute son ampleur, et où les frontières ont reculé  d’une façon spectaculaire, en est le témoignage.

Tout allait bien selon la carte de route revelienne jusqu’à 2008, lors du collapse des banques d’investissements Américaines et des grandes sociétés financières. L’Europe socialiste a disparu, en grande partie parce que les Allemands en ont marre de financer les pensions des Grecs, mais aussi parce que les banques étaient très à l’aise avec des taux d’imposition très élevées en théorie en retour d’un environnement régulatoire très flou. Aujourd’hui, il est clair que le communisme n’est pas un choix raisonnable, mais il n’est pas évident que le socialisme européen puisse revenir dans le moyen terme : tout au contraire, les masses sans espoir tournent de plus en plus vers ce qu’on appelait « extrême droite »  dans les années 90 et 2000.

Il est difficile à recommander ce livre : d’un côté, les thèses reveliennes sur le socialisme et le communisme sont toujours pertinentes ; d’un autre côté, le livre est tellement centré sur des débats de l’époque (le Chili d’Allende, la transition portugaise, les accords de Helsinki) qu’il peut éloigner les lecteurs modernes. L’irrelevance de La tentation totalitaire aujourd’hui n’est la faute à personne : Jean-François Revel était surtout un polémiste, pas un philosophe ; ses textes étaient censés d'être datés. En tout cas, le vidéo ci-dessous est un bon résumé du livre pour les audiences d’aujourd’hui.


Saturday, February 8, 2014

Der Himmel über Berlin - Wim Wenders

Las pocas audiencias modernas que conocen Der Himmel über Berlin (Wings of Desire, en inglés) sólo lo hacen a través de City of Angels, el remake que hicieron Meg Ryan y Nicholas Cage a finales de los 90. Incluso críticos serios y viejos como Roger Ebert y Jessica Winter hablaron recientemente sobre Der Himmel a través del prisma de City of Angels, quizá para tener un punto de contacto con sus lectores jóvenes.

Que una de las obras más queridas y más compleas de Wim Wenders sea conocida a través de una versión más reciente es una pena, aunque me imagino que es inevitable: con pocas películas he visto un consenso tan generalizado respecto a las virtudes de Der Himmel über Berlin: todo mundo coincide que es una gran película.

En ese sentido, resulta complicadísimo hacer una reseña sobre esta película: ya se ha dicho todo sobre ella. A mí sólo me basta decir que es una oda a la vida y al arte de hacer cine. Y también me basta con decirles que pueden gozar de esta película gratis aquí vía Vimeo.

Wednesday, February 5, 2014

Rarezas - Héroes del silencio

Rarezas fue el disco de caras b y versiones inéditas que sacó EMI cuando Héroes del Silencio se desintegró en 1997. Esta es una obra prácticamente para coleccionistas y nada más: a los que actualmente nos aburre la música de Héroes del Silencio podemos prescindir de Rarezas.

En su momento, se dijo que la versión de "La chispa adecuada" incluida en este disco era mejor que la original, pero eventualmente el gran público se impuso...


Tuesday, February 4, 2014

Siete ensayos de interpretación de la realidad peruana - José Carlos Mariátegui

El Virreinato aparece menos culpable que la República. Al Virreinato le corresponde, originalmente, toda la responsabilidad de la miseria y la depresión de los indios. Pero, en ese tiempo inquisitorial, una gran voz cristiana, la de fray Bartolomé de Las Casas, defendió vibrantemente a los indios contra los métodos brutales de los colonizadores. No ha habido en la República un defensor tan eficaz y tan porfiado de la raza aborigen.

Si en su vigésimo aniversario pocos se acordaron del EZLN, menos aún tendrán idea de quién fue José Carlos Mariátegui. Y, sin embargo, Mariátegui es uno de los pensadores más importantes que hayan existido en Iberoamérica: el Che Guevara tomó parte de sus ideas para desarrollar su teoría foquista; Sendero Luminoso se reclamó heredero e implementador del pensamiento de Mariátegui, y los presidentes indigenistas (Correa, Evo Morales, y en cierta medida el recientemente fallecido Hugo Chávez) del presente son herederos de su legado, aunque no lo digan o no lo sepan. Cuando se volvió un movimiento indigenista (en sus orígenes lo que querían era renegociar el TLCAN), el EZLN fue el segundo ensayo sistemático de implementar el mariateguismo.

Mariátegui fue el primer intelectual marxista iberoamericano que desarrolló una vertiente propia de teoría socialista que eventualmente desembocó en lo que hoy se conoce como indigenismo. Antes de él, el marxismo en Iberoamérica estaba dividido en dos grupos: por un lado estaban los intelectuales que se limitaban a repetir los dogmas del marxismo-leninismo; por el otro se encontraban los auténticos revolucionarios que estaban muy ocupados haciendo la revolución como para sentarse a teorizar y a sistematizar sus pensamientos. Emiliano Zapata, el único caudillo revolucionario socialista antes de Mao que le dio su justo valor al problema de la tenencia de la tierra, plasmó su ideario político en el Plan de Ayala en lugar de hacer libros y panfletos revolucionarios. En ese sentido, es muy destacable que la Revolución Mexicana, mencionada ocasionalmente por Mariátegui, no dejó un teórico de altura. La escasa herencia teórica de la Revolución Mexicana  se debe en parte a que, en realidad, en México hubo más de guerra civil que de revolución; en parte también, a que algunas de las ideas de la revolución se plasmaron en la Constitución de 1917: había que construir un país, no escribir libros; pero en gran parte, la poca trascendencia téorica de la Revolución Mexicana se a que los pocos intelectuales que hubo en el movimiento armado se limitaron a repetir los mantras de sus contrapartes europeos. 

Mariátegui no tomó las armas: estaba discapacitado de una pierna y murió muy joven (35 años), además de que en el Perú de su época no estaban dadas las condiciones objetivas o subjetivas para que una vanguardia obrera, estudiantil, o campesina se atreviera a derrocar el régimen demoburgués. No obstante, la importancia de Mariátegui no puede ser menospreciada. Por un lado, logró adaptar los preceptos y postulados del socialismo científico a una realidad totalmente diferente en la que Marx desarrolló su teoría. Con ello, Mariátegui fue el primer intelectual, en  todo Iberoamérica, en postular y probar que el problema de la pobreza indígena es, fundamentalmente un problema económico, específicamente de tenencia de la tierra, y no uno cultural o racial, como cree (y sigue creyendo) una gran parte de la burguesía de la región. Al respecto, vale la pena destacar el siguiente fragmento de “El problema del indio”:
“La cuestión indígena arranca de nuestra economía. Tiene sus raíces en el régimen de propiedad de la tierra. Cualquier intento de resolverla con medidas de administración o policía, con métodos de enseñanza o con obras de vialidad, constituye un trabajo superficial o adjetivo.” 
“El indio, a pesar de las leyes de cien años de régimen republicano, no se ha hecho individualista. Y esto no proviene de que sea refractario al progreso como pretende el simplismo de sus interesados detractores. Depende, más bien, de que el individualismo, bajo un régimen feudal, no encuentra las condiciones para afirmarse y desarrollarse. El comunismo, en cambio, ha seguido siendo para el indio su única defensa.”
Como suele ocurrir con los análisis marxistas, la descripción conceptual de la situación del indígena por parte de Mariátegui es impecable: el problema de la pobreza indígena en Iberoamérica es fundamentalmente económico y todo lo demás son distractores. El problema, como también suele ocurrir con el marxismo viene con la parte normativa: para resolver el problema económico de los indígenas, Mariátegui propone volver al comunismo practicado por los incas antes de la llegada de los españoles. Para resolver el futuro, hay que saltar al pasado. Peor aún: a pesar de lo que digan las ONGs y los buenistas europeos, hay muchísima evidencia histórica que indica que el Imperio Inca fue lo que más se le pareció a la Gestapo hasta el nacimiento de la propia Gestapo; en alguna ocasión, Mario Vargas Llosa llegó a especular que la razón por la que los incas no tuvieron un sistema de escritura fue porque los propios incas lo prohibieron.

Mariátegui es consciente de las limitantes que un regreso al comunismo inca pondría a las libertades individuales pero asume el costo intelectual que esto representa: 
“Al comunismo inkaico [sic] –que no puede ser negado ni disminuido por haberse desenvuelto bajo el régimen autocrático de los Inkas [sic]-, se le designa por esto como comunismo agrario.”
¿Es relevante el mariateguismo a la luz del fracaso del foco guevarista, la narcotización de Sendero Luminoso, la irrelevancia del EZLN, el desastre económico de Ecuador, y la ópera bufa en la que se ha convertido Bolivia? Más o menos:

Dos textos de Siete ensayos de interpretación de la realidad peruana son completamente irrelevantes hoy porque son textos de coyuntura: “El proceso de la instrucción pública” y “El proceso de la literatura”. El primero es una crítica a personalidades y políticas públicas implementadas en su momento; ya no es importante para el debate político actual salvo para sacar alguna cita despampanante. El segundo es una monografía sobre escritores peruanos del siglo XIX e inicios del XX, que quizá tenga algún valor para los estudiantes de literatura peruana más allá de la siguiente mención sobre César Vallejo: “Vallejo interpreta a la raza [indígena] en un instante en que todas sus nostalgias, punzadas por un dolor de tres siglos se exacerban.”

De los otros 4 ensayos, “Regionalismo y centralismo” trata sobre un tema perenne en el debate político peruano y toral en la última refundación del Estado: la descentralización. Este ensayo sigue siendo altamente relevante, aunque no tanto como durante la década pasada.

Los otros tres ensayos (“Esquema de la evolución económica”, “El problema del indio”, y “El problema de la tierra”) son sumamente relevantes y lo seguirán siendo mientras los indígenas en Perú y en Iberoamérica sigan estando excluidos de las estructuras productivas de la sociedad. Como mencioné anteriormente, el diagnóstico de Mariátegui es impecable: la pobreza de los indígenas, y cada vez más el narcotráfico, es un tema económico, y fundamentalmente de tenencia de la tierra. Mientras ese tema no se resuelva y no avancemos todos juntos, no avanzará nadie.